Ritos de la ceremonia

 AMONESTACIONES
Costumbre que se remonta a la época del emperador Carlomagno, que veía como se producían muchos matrimonios consanguíneos. Para evitar esto, Carlomagno obligaba a los novios a comunicar su intención de casarse al menos con una semana de antelación. Este anuncio de la próxima boda se colgaba de la puerta de la iglesia para que todo el mundo pudiera verlo.
Las amonestaciones son por lo tanto el anuncio público de la futura boda, para que si alguien conoce algún motivo por el que dicha boda no deba celebrarse, pueda impedirlo.

 ANILLO DE PEDIDA

La entrega del anillo por parte del novio a la novia, significa su amor sin final, que viene simbolizado por su forma circular. Los más comunes son de oro y diamantes, materiales ambos fuertes y puros, como el amor. La costumbre de llevarlo en el dedo anular viene de la vieja creencia de que la vena de ese dedo llegaba directamente al corazón.
Según se desprende del Antiguo Testamento, ya en aquellos tiempos se pedía la mano de la novia con un anillo.
El Papa Nicolás I, en el siglo IX, decreta que el acto de entregar el anillo a la novia es ya una declaración oficial del deseo de casarse.
Antiguamente, el futuro novio mandaba a sus amigos y parientes en su representación para que conocieran a la futura novia y a su familia. Si estos emisarios veían durante la visita a un hombre ciego, un manco o una mujer embarazada, significaría que el matrimonio podría estar predestinado al fracaso. Por el contrario, nodrizas de varones, lobos o pichones de paloma eran símbolos de buenos augurios.

 EL RAMO DE LA NOVIA

Esta costumbre data de los serrainos y fue traída a Europa por los cruzados. Se utilizaba el azahar, como símbolo de pureza.
En la actualidad, el ramo lo suele comprar el novio o el padrino, pero es éste último el que se lo entrega a la novia en su casa antes de la ceremonia.
Hoy en día el ramo se hace de flores de lo mas variado, según los gustos de la novia.
En EE.UU. la novia suele lanzar el ramo entre sus amigas y familiares solteras; es España sin embargo se hace entrega del ramo a alguien previamente decidido por los novios. En algunos sitios la novia lanza el ramo a las solteras y la liga a los solteros, y quien reciba estos preciados objetos será el próximo en casarse.

Antiguamente, la novia no lanzaba el ramo, sino un zapato.
 
EL VELO

Antiguamente, el velo simbolizaba el alejamiento de la vida exterior, la virginidad, la modestia, la inocencia y la virtud de la novia, de ahí su color blanco, aunque en algunos lugares se utiliza el azul, color asociado a la Virgen María; estos significados se han ido perdiendo con el paso de los años, no así la costumbre de usarlo el día de la boda.
En algunos lugares de Asia y del Medio Oriente se utiliza para ocultar por completo la cara de la novia que jamás ha sido vista por el novio. Es después de la ceremonia cuando se le permite al novio que levante el velo a la novia, para de esa forma ver su cara por primera vez. Esto todavía ocurre actualmente.
En la Inglaterra del siglo IX se hizo popular su uso asociado con la modestia y la castidad.
Actualmente, algunas novias todavía eligen el velo como complemento de su vestido, y es en el momento en que el oficiante pronuncia las palabras “ahora ya puede besar a la novia” cuando el novio lo levanta y lo aparta hacia atrás.

LA LIGA

Según algunos estudios, el rito de la liga comenzó en Francia en el siglo XIV. Los invitados corrían detrás de la novia y le quitaban la liga como podían, ya que se pensaba que traía buena suerte. Con el tiempo fueron las novias las que voluntariamente lanzaban la liga, con el único fin de evitar que todos los invitados acabaran bajo su falda.

ALIANZAS

Su forma circular simboliza el carácter infinito del amor, un sentimiento que empieza nunca se acaba.

El origen de la tradición de intercambiar anillos el día de la boda viene de muy antiguo. Algunas teorías lo sitúan en el año 2000 A.C.en el antiguo Egipto. También se sabe que era una costumbre de las ceremonias paganas entre los romanos. En el ritual toledano se usaban dos anillos y en el romano solo uno.
En la antigüedad, los maridos ataban con cuerdas de hierba los tobillos y las muñecas de su esposa, en la creencia de que este ritual les aseguraba que los espíritus de sus mujeres no les abandonarían demasiado pronto.
En tiempos del imperio romano los anillos eran de hierro; los de oro solo los podían usar los senadores y magistrados. Con el tiempo se fue extendiendo el uso del anillo de oro a todos los estratos sociales y económicos.
A la Iglesia le costó aceptar esta costumbre como parte de la ceremonia religiosa del matrimonio.
La alianza se lleva en el dedo anular por la antigua creencia de que la vena de este dedo iba directamente al corazón.

EL PADRINO

Está representado casi siempre en la figura del padre de la novia, el cual simbólicamente la entrega en el altar al novio, lo que se interpreta como la bendición y conformidad del padre a ese matrimonio.
En muchos lugares es el padrino el que suele regalar el ramo a la novia y le recita un verso especialmente escrito para la ocasión.

LAS ARRAS

Son las 13 monedas de plata, oro y alpaca que se intercambian durante la ceremonia religiosa.
La entrega mutua de 13 monedas (antes solamente el hombre hacía entrega a la mujer de las arras) simboliza los bienes a compartir. El que sean 13 monedas y no otra cantidad no tiene un origen claro; algunos estudiosos opinan que está relacionada con la mala suerte, que también se compartirán los momentos difíciles.
En la antigüedad simbolizaban las propiedades y bienes que el futuro matrimonio compartiría y el regalo que el novio hacia a la novia en agradecimiento a su virginidad.
Existe la creencia de que 12 simbolizan los bienes que ambos compartirán por cada uno de los meses del año, y la número 13 son los bienes que compartirán con los más necesitados.

EL VESTIDO DE LA NOVIA

Fue la reina Victoria, en el siglo VI, la que impuso la tradición de casarse de blanco, como símbolo de la inocencia, virginidad y pureza. Antes de esto, las muchachas preferían el color plateado.
Sin embargo, el color del vestido tiene mucho que ver con las distintas culturas; así como para los occidentales el color blanco representa la pureza, para el islamismo es el negro, y en Japón lo es el rojo.

EL BESO

Mediante el beso, se mezclan los alientos y parte del alma de uno se queda en el otro; con esto se festeja la unión de dos seres que el amor vuelve uno solo.